Nacional

La Columna del Dr. Campa

Reforma Electoral: Un lobo con piel de cordero

Raúl Héctor Campa García Miércoles 16 de Noviembre de 2022 “El poder no cambia a las personas.

Sólo revela lo que verdaderamente son”. José “Pepe” Mujica. Ex presidente de Uruguay. (Montevideo, 20 de mayo 1935).

La polarización persistente de la ciudadanía, provocada por el presidente en sus mañaneras intervenciones, despotricando “contra sus adversarios” con adjetivos peyorativos, se agudizaron días antes y después de las marchas que se realizaron en todo el país contra la Reforma Electoral propuesta por él, pero que en algunos puntos “bien intencionados”, esconde “veladamente” el regreso del control de las elecciones por el Estado, quitando la autonomía al Instituto Nacional Electoral, que no es perfecto; pero es, como cualquier Institución, perfectible.

Son ya del dominio público, todos los epítetos con que descalifica a la ciudadanía que, en forma pacífica y ordenada, acudió a estas manifestaciones. En palabras del propio habitante circunstancial del Palacio Nacional, diciendo:

“[…] la simulación, yo creo que fue muy importante la marcha de ayer. Fue como una especie de striptease político PÚBLICO del conservadorismo en México. Y esto es muy bueno, pero muy bueno porque si no emerge esto se mantiene soterrado y hace mucho daño para tener una sociedad mejor, más justa, más igualitaria, más fraterna. Errores históricos, por ejemplo el que se va Franco y queda el franquismo y nadie dice nada y se quedan callados; en Chile sale Pinochet, pero se mantiene ese pensamiento, y nadie dice nada porque evitan el debate la confrontación, convierten estos temas en tabú, en temas vedados y en el mediano y largo plazose daña muchísimo, está saliendo ahora la HIPOCRESIA, que prevalecía y que sigue existiendo. Está saliendo el CLASISMO, el RACISMO; cuanto ENGAÑABAN que ERAN DISTINTOS, el PRI y el PAN, los INDEPENDIENTES, cuanto engañaban de que la prensa, los medios de información eran objetivos profesionales, equilibrados, cercanos al pueblo, distantes del poder. Pues todo eso está quedando en evidencia, y es muy bueno”. (Continuó con sarcástica sonrisa): “porque vaya que le metieron, se aplicaron potentados, voceros, INTELECTUALES ORGANICOS, ARTICULISTAS, líderes políticos. No participó mucha gente (a pregunta interrumpida de una periodista), contestó: No, no, no, les falta más, pues para éste, tener una idea, yo calculo que eeh por eso no vinieron al Zócalo, no hubiesen eeh llenado ni la mita del zócalo.

Debe ser como unos sesenta, cincuenta o sesenta mil, sí. El zócalo se llena con 125 mil […]” (Sic). Es una parte de lo dicho por él, agregando que: “ojala las marchas le sigan que sean perseverantes que no se cansen”.

Se apoya en el pasado, del franquismo, en el Pinochetazo, que en este último, cuando fue estudiante, nunca se manifestó (de seguro), como muchos sí lo hicimos, cuando estábamos en la universidad. Que por cierto duró 14 años para titularse, de una carrera que se concluía en 9 semestres (cuatro años y medio).

A todos los que marchamos nos mide con el mismo rasero, no le informaron o finge demencia (senil, porque no creo que tenga Alzheimer), que en esos contingentes, fueron algunos sobrevivientes del movimiento del 68 y algunos de 1971; se le olvida que todavía en la elecciones de 1988 pertenecía al PRI, cuando mucha gente se manifestaba contra el gobierno hegemónico (PRI ahora casi mimetizado totalmente en MoReNA).

En ese mismo faño, un poco después de las elecciones que ganó Salinas, lo invitó Cuauhtémoc Cárdenas o Graco Ramírez, a la Corriente Democrática dentro del PRI, de donde junto con el Partido Comunista, meses después se formó el PRD. Tiene amnesia de que gente de la verdadera izquierda como Roger Bartra, Jesús Zambrano entre otros, politólogos de prestigio e intelectuales (denostados por usted Sr. Presidente), y muchos, pero muchos más ciudadanos participaron en esta marcha del domingo 13 de noviembre.

El presidente pertenecía, en aquellos tiempos, al grupo de priistas de los que ahora los clasifica con adjetivos peyorativos con cínica hipocresía. Lo mismo a los comunicadores, periodistas y escritores que no coinciden con su manera de gobernar, pero lo más grave es poner estos mismo adjetivos a una gran mayoría de ciudadanos que fuimos a la marcha por nuestro propio pie.

Además, sus incondicionales (chayoteros del nuevo sexenio, igual que en los anteriores gobiernos) le mal informan al decirle, inventadas, cifras del gran contingente que marchó de la avenida de La Reforma (del Ángel de la Independencia al Monumento de la Revolución; que fueron 10 a 12 mil y él, calculó (no sé cómo) 50 ni 60 mil personas. Siempre minimizando o criticando cuando disienten con él. En todo el país “No fuimos 10, nofuimos 100, cuéntenos bien, sea decente, señor presidente”.

El que se mostró desnudo, tal como es (bichi, empelotas –choras), fue el presidente en su striptease que monta en cada mañanera, ahora lo realizó ante la multitud ciudadana que acudió a la marcha. De lo que adjetiva, el mismo lo padece: Miente, engaña y diariamente actúa en el “Chippendales” mañanero. Quizá algún ciudadano que no traiga efectivo en su cartera (100 o 200 pesos) para colgárselo en su ropa íntima ad hoc, le pasará la tarjeta del Banco del Bienestar por bendita sea la parte, a falta de TPV (Terminal Punto de Venta).

Perdón Sr. Presidente, pero usted también ofendió a una multitud ciudadana que marchó el domingo 13 y sin acarreos ni coacción (me consta en la marcha de Culiacán) y ofende durante las mañaneras a más de 60 millones de ciudadanos que no votaron por usted el 2018 ¡No le ha “caído el veinte” que es el presidente de todos!

¿Cuándo votaran los Diputados y Senadores por las segundas o terceras vueltas electorales? Allí tendrán el apoyo total del ciudadano sin partido, y también si disminuye a las bancadas del congreso y el pluripartidismo, algunos convertidos en rémoras de los principales partidos. Pero ya se le está acabando el tiempo.

Cierto es que desfilaron, que fueron los menos, “figurines” de la farándula política, que como lo expuse en mi artículo anterior del 11 de noviembre (La Marcha del domingo. 13 de noviembre), publicado en medios digitales (infocajeme.com, Despierta Sonora, WhatsApp, Twitters y Facebook, no sé si en Notio “Noticias Obregón”): “Esta marcha debe ser realmente ciudadana, los militantes y líderes de los partidos tienen derecho de asistir pero no como tales; sin colores ni logotipos partidistas, ni ser protagonista, ni deben encabezar este movimiento CIUDADANO acaparando cámaras

…” Desgraciadamente hubo algunos, principalmente en la Ciudad de México, que ante el asedio de los reporteros no resistieron privarse de los reflectores, unos y otros, portar los colores distintivos de su partido (el amarillo del PRD, el antiguo rayito de esperanza del ahora presidente de México, cuando perteneció a ese Partido, rayito que ya se le desvaneció).

En la farándula política “cosas veredes Sancho” y “si los perros ladran”, la ciudadanía va caminando hacia una Nación verdaderamente democrática. La embriaguez del poder (el striptease Político), desnuda tal cual a quien lo sustenta. “El poder no cambia a las personas. Sólo revela lo que verdaderamente son”. José Mujica.

raulhcampag@hotmail.com @RaulHectorCamp1 

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